Para envío
Antonio Orihuela es uno de los poetas que despunta en el panorama de la poética crítica española de las últimas décadas. Su obra se inscribe en la poesía de la conciencia. La de Orihuela es una poesía que enfrenta el mundo policial, mediático, y empresarial que vivimos. Que define y ataca el orden de las cosas: el trabajo asalariado, la cultura oficial y la del mercado (que acaso ya son la misma), la violencia socializada, la externalización de costes, la clase media y sus ilusiones. A la vez refleja la realidad no complaciente de este lado: conformismo, miedos que cristalizan en individualismo, relaciones sociales alienadas. En sus poemas, Orihuela desmenuza las estrategias del Poder, pero también expone las alternativas ya en curso, las corazonadas de un mundo nuevo, la convivencialidad del barrio y de la comuna. En estos versos reconocemos señales, recordamos intuiciones para pensar las cosas desde otras coordenadas, desde lugares menos frecuentados. Quizás la poesía sirva para romper el embrujo, el ensueño colectivo en el que vivimos y que es tan grande como el propio sistema, incluso puede ayudar a