Hay un buitre literario que a veces planea de forma indecorosa. No es el buitre del páramo, el soberbio volador que lo hace pico al viento o que devora piltrafas tumbadas en el hosco barranco. Es el buitre de la metáfora, esa fea manía de contar lo que no se cuenta, de envilecer el sano uso de las palabras para que el lector falsamente avispado adivine qué se ha querido decir. Fernando Aínsa no es uno de esos malabaristas. Formado en los paredones de Oliete, observador incansable de los círculos que las grandes aves dibujan en el cielo, de las sombras fugitivas proyectadas en el terreno, adquiere la marca buitre en propiedad con todos los honores y merecimientos. El libro, que atestigua un sobresaliente dominio de la lengua, demuestra cómo es posible poner ese don al servicio de la descripción minuciosa de los fenómenos naturales, de disciplinas poco o nunca empleadas en el ejercicio de la poesía; en este caso la compleja etología del buitre leonado ?Gyps fulvus-. Pero a mí, confeso seguidor de las cuitas campestres de las aves necrófagas, ha habido algo que, en especial, me ha sobrecogido, vencido, entusiasmado, esa declaración de principios que nuestro poeta articula de modo lapidario y militante: ?Ya soy uno de ellos?; la incorporación decidida a unas huestes que suponen el ejemplo máximo de perfeccionamiento de la funcionalidad, diría mejor de la belleza de la funcionalidad, huestes que, sin embargo, necesitan de nuestro apoyo para no desaparecer, víctimas de la miseria cultural y de la ruindad económica. Fernando, de manera incondicional, les da ese apoyo, enumera, en un ejercicio singular en la historia de la lírica, las razones que las están llevando al exterminio; Fernando Aínsa se la juega en términos literarios, y en términos naturalistas. Nos hallamos pues ante un libro de poesía cargado de la necesidad de justicia que reclaman los hombres buenos, un libro escrito con la pasión que consigue descubrir la grandiosidad de las formes inertes del acantilado y de sus apéndices emplumados; la piedra y la vida. El poeta Fernando Aínsa, varón consecuente, en lógica y placentera coda, ofrece su mente y su cuerpo a la voracidad entrañable del pico azulado. Busca y consigue asimilarse a la gran ave mediante un ?Feliz picotear de mis entrañas inaugurando el sacrificio / Altar de la celebración / allí estarían los buitres / Mi cuerpo desgarrado / Carniceros ávidos me repartirían entre ellos / para luego volar en sus cuerpos dividida / mi ambición de frustrado panteísta / agnóstico resignado / creyente en la sola Naturaleza.? Hermoso libro.
Francisco Ferrer Lerín
PODER DEL BUITRE SOBRE SUS LENTAS ALAS
AUTOR/A
AÍNSA AMIGUES, FERNANDO
Fernando AÍNSA, escritor de origen aragonés y uruguayo de adopción. Hijo de familia exiliada en Uruguay. Ha trabajado en la Unesco (París) entre 1974 y 1999, donde fue Director Literario de Ediciones Unesco. Desde fines de1999 reside entre Zaragoza y Oliete (Teruel) consagrado a la escritura y actividades editoriales y docentes.<BR><BR>Autor, entre otros, de los ensayos Los buscadores de la utopía (Monte Avila, 1977); Identidad cultural de Iberoamérica en su narrativa (Gredos, 1986); Necesidad de la utopía (Tupac, 1990); Historia, mito y utopía de la Ciudad de los Césares (Alianza Universidad, 1992); La reconstrucción de la utopía (El Correo de la UNESCO, 1998) traducida al francés, portugués de Brasil, ruso, rumano, polaco, checo y macedonio; Pasarelas. Letras entre dos mundos (Indigo, 2002); Espacios del imaginario latinoamericano (Arte y Literatura, La Habana, 2002); Narrativa hispanoamericana del siglo XX. Del espacio vivido al espacio del texto (Prensas Universitarias de Zaragoza, 2003); Del topos al logos. Propuestas de geopoética (Iberoamericana, 2006), Espacios de la memoria (Trilce, 2008) y Confluencias en la diversidad (Trilce, 2011).<BR><BR>Como narrador ha publicado El testigo (1964); En la orilla (1966); Con cierto asombro (1968); El paraíso de la reina María Julia (1994?2006), publicada en España, Colombia, Uruguay y Cuba; Los que han vuelto (Mira, 2009); Naufragios del Mar del Sur (Arcibel, 2011) y los libros de aforismos y textos breves Travesías. Juegos a la distancia (Ediciones Litoral, 2000), Prosas entreveradas (Cálamo, 2009). Sus relatos breves figuran en varias recopilaciones publicadas por Montesinos, Ediciones Thule y Quimera.<BR><BR>En 2007 publicó su primer libro de poesía Aprendizajes tardíos (Renacimiento) y en 2011, Bodas de Oro (AbeZetario). <BR><BR>Es miembro correspondiente de las Academias de Letras del Uruguay y de Venezuela y miembro del Patronato Real de la Biblioteca Nacional de España.