El colonialismo contemporáneo fue mitificado por escritores y poetas con el propósito de justificar y enaltecer el expansionismo territorial europeo. Si los ingleses escribieron sobre la India y los franceses sobre Argelia, los españoles lo hicieron, principalmente, en torno a Marruecos. España también estuvo presente, entre 1884 y 1976, en África Occidental, aunque los territorios del Sáhara, Ifni y la zona del Draa interesaron mucho menos desde el punto de vista literario, y eso a pesar de que allí hubo una guerra en 1957 y 1958. Hubo que esperar al fin de la época colonial para que los autores se ocuparan de esta zona y para que fabularan sobre lo que allí ocurrió durante los casi cien años en los que los españoles recorrieron el desierto mientras dejaban una huella imborrable: la de su propia lengua, que ha dado lugar a una nueva literatura hispánica.