«Este libro lo escribí y dibujé mientras entraba y salía de instituciones psiquiátricas, y bajo las limitaciones de una severa medicación que me hacía complicado hilar las ideas y hasta sujetar el lápiz en la mano. El pulso dubitativo de los dibujos es prueba de ello.» Rebeca Khamlichi nos hace participes en esta obra del delicado, duro y largo viaje que supuso su experiencia con la ansiedad y la depresión. Un mosaico lírico y desgarrador en el que la autora refleja una cruda realidad dotándola de humor y, sobre todo, de una sensibilidad extraordinaria a través de un texto e ilustraciones llenas de fuerza, simbolismo y esperanza.
AUTOR/A
KHAMLICHI, REBECA
Rebeca Khamlichi (Madrid, 1987) no es una pintora. Es una forma de pintar. En su universo conviven a codazos el diseño gráfico y la iconografía religiosa del siglo XVII, los dibujos animados y Michael Haneke, el rosa chicle y las Pinturas Negras de Goya, el Superflat y la copla: algo así como si Doña Concha Piquer se arrancara por haikus. Tiene dos galgas: una con nombre de canción y otra, como su gata, con nombre de fruta. Pinta en Madrid, en una terraza con vistas a los tejados del barrio de Lavapiés. Y lo hace, dice, porque de momento los acrílicos se dispensan sin receta médica.