El regreso del sujeto agrupa una selección de textos de reflexión teórica escritos y organizados por Jesús Ibáñez con la intención de ofrecer unos materiales válidos para la construcción de una nueva metodología del socioanálisis. Esta edición incluye una ?introducción? y una ?exoducción? que corresponden a las dos últimas disertaciones públicas de Jesús Ibáñez con motivo de la presentación de la primera edición de esta obra (Amerinda, Santiago, Chile, 1991). Los textos introductorio y exoductorio constituyen, por su estructura, una buena guía para recorrer el camino de la realidad a la teoría, y viceversa, que traza este libro. La nueva propuesta metodológica de Jesús Ibáñez está regulada por el presupuesto de reflexividad: lo objetivo se refleja, y se refracta, en lo subjetivo. El sujeto es integrado en el proceso de investigación como sujeto-en-proceso. La conversación sustituye al lenguaje pregunta/respuesta de la investigación clásica, anclada en la encuesta estadística. La investigación social no clásica, de segundo orden, que propone el autor, se aplica en dispositivos de promoción: para promover el orden social en una dirección deseada.
AUTOR/A
IBAÑEZ ALONSO, JESÚS
Jesús Ibáñez fue el único hijo de una madre soltera, propietaria de un pequeño comercio y de algunas vacas en la aldea de San Pedro del Romeral, en el Valle del Pas (Cantabria). Muy pronto le interesó la filosofía y decidió estudiar Ciencias Políticas trasladándose a Madrid.<BR>En la facultad de Ciencias Políticas y Económicas de la Universidad de Madrid, más tarde Universidad Complutense de Madrid, entró en contacto con disidentes que se convertirían en figuras importantes del pensamiento español, como Alfonso Sastre o Ignacio Aldecoa. Durante las detenciones de estudiantes e intelectuales de 1956, Ibáñez y otros tres estudiantes redactaron un escrito de solidaridad. Los cuatro fueron juzgados e Ibáñez fue condenado a seis años de cárcel, aunque finalmente sólo cumplió seis meses.<BR>Su encarcelamiento provocó su expulsión de las instituciones académicas con las que colaboraba: el Instituto de la Opinión Pública, la Escuela de Periodismo y la Universidad Complutense. Cuando salió de la cárcel, Ibáñez se encontró sin trabajo ni posibilidad de encontrarlo y fundó el Instituto de Investigaciones de Mercado ECO.<BR>A finales de los años sesenta participó en la fundación de la Escuela Crítica de Ciencias Sociales de CEISA de Madrid, un marco docente libre, que fue clausurado en sucesivas ocasiones por la policía franquista. En 1974 Ibáñez se reincoporó a la Universidad Complutense gracias al apoyo de, entre otros, Salustiano del Campo. En 1982 logró la cátedra de Métodos y Técnicas de Investigación Social de esa misma universidad.