Si examinamos la contribución de Zizek al pensamiento contemporáneo, esto tiene la apariencia de una película de David Lynch. Y esto no porque Zizek se refiera a menudo a Lynch para elucidar sus postulados teóricos, sino porque comparten una misma forma de materialismo. Es de todo conocido que Zizek está casado con la filosofía hegeliana, el psicoanálisis lacaniano y la política marxista, pero en esta amalgama quien ocupa el lugar de honor es Hegel. Solamente permaneciendo dentro del campo del pensamiento y no recurriendo a ninguna condición material externa descubre uno la materialidad como causa de subjetividad. Así, Zizek elige al psicoanálisis lacaniano y la filosofía de Hegel como su piedra de toque filosofal por la misma razón que privilegia a Lynch como cineasta. Ambos apuntan en dirección de un nuevo materialismo.