La matemática Sarah Hart nos descubre el profundo vínculo entre la literatura y las matemáticas a través de un viaje por los libros más destacados de la literatura universal.A menudo pensamos que las matemáticas y la literatura son dos mundos opuestos, pero ¿y si en realidad estuvieran profundamente conectados? En Érase una vez los números primos, la profesora Sarah Hart nos muestra las múltiples conexiones entre estas disciplinas para que podamos disfrutar de ellas en su totalidad.
¿Sabías, por ejemplo, que Moby Dick está repleto de sofisticada geometría? ¿Que en sus novelas de flujo de conciencia, James Joyce incluyó intencionadamente referencias matemáticas? ¿Que George Eliot estaba obsesionada con las estadísticas? ¿Que Jurassic Park se apoya en patrones fractales? ¿Que tanto Sir Arthur Conan Doyle como Chimamanda Ngozi Adichie escribieron personajes matemáticos?
Desde sonetos hasta cuentos de hadas y pasando por la literatura experimental francesa, la profesora Hart demuestra cómo las matemáticas y la literatura son partes complementarias de la búsqueda por entender la vida humana y nuestro lugar en el universo.
Érase una vez los números primos es un libro ingenioso y divertido que nos invita a un inolvidable viaje que recorre los clásicos que creíamos conocer para revelarnos nuevas capas de belleza y maravilla.
ÉRASE UNA VEZ LOS NÚMEROS PRIMOS
AUTOR/A
HART, SARAH
Sarah Hart es una respetada matemática y divulgadora de la materia.<BR> Licenciada en Matemáticas por la Universidad de Oxford, la doctora Hart completó un máster y doctorado en la materia en la Universidades de Manchester. En 2013, la ascendieron a profesora titular de matemáticas en el Birkbeck College (Universidad de Londres), convirtiéndose así en la profesora STEM más joven de Birkbeck y en la primera profesora de matemáticas de la historia de la universidad, así como en una de las cinco profesoras de matemáticas de menos de cuarenta años en el Reino Unido.<BR> Actualmente ocupa la Cátedra Gresham de Geometría, la más antigua de Reino Unido y es la primera mujer en ocupar el puesto. Es, asimismo, la presidenta de la Sociedad Británica de Historia de las Matemáticas y miembro de la Sociedad Matemática de Londres.<BR> Sus publicaciones académicas se estructuran alrededor de las matemáticas puras, pero tienen gran relevancia también en otros ámbitos como, por ejemplo, en la teoría de la codificación, en la criptografía o en la historia; y su investigación se centra especialmente en los vínculos entre las matemáticas, la historia, la cultura y la creatividad.