Para envío
Sufrieron acoso, rechazo, abusos sexuales o terror cotidiano, en una atmósfera que en ese momento era la normalidad y donde los más débiles fueron ayendo, o sobreviviendo, y algunos quedaron tocados para siempre. Recuerdan nítidamente esa infancia en algunos episodios o detalles, en escenas qeu no se borran. En cambio, otros aspectos se han ido difuminando y muchas veces estas personas no saben qué hay detrás de esa niebla de la memoria, que quizá se ha extendido para ocultar algo terrible, y solo queda la sensación de que detrás está aún lo peor de todo
Prólogo de Iñigo Domínguez Gabiña