Para envío
Patrick Chabal y Jean-Pascal Daloz tienen el coraje de investigar cómo los africanos se han adaptado a una situación en la que el desarrollo económico no se ha materializado. Al observar la corrupción endémica, y el modo en que los planes de ajuste han reforzado la dependencia exterior y la depredación interna, no se adhieren a la denuncia fácil; por el contrarioi, intentan analizar el caos como una manera de funcionar. Los autores mantienen que África camina, con su ritmo y estilo particular. Sin equiparar modernidad ?que irrumpe, africanizada, a las puertas del tercer milenio?; y desarrollo material ?que no irrumpe?, camina con lógicas propias: sin disociar política y religión, sin buscar la protección del individuo, sin ver las elecciones como confrontaciones ideológicas, sino como competiciones entre caciques y subastas de recursos.